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06/02/2004
La denuncia de Paolini

Debería investigarse a fondo


Los seis policías quedaron en libertad. La denuncia ante la Procuración General de la Provincia de Buenos Aires es muy grave.


Lo que dijeron los policías.


Una de las novedades más importante al finalizar el año 2003 fue la excarcelación ordinaria otorgada por la Cámara de Garantías de Pergamino a los seis policías que estaban detenidos. Como se recordará los uniformados estaban acusados en la causa judicial que recayó en el Juzgado Nº 2 del juez de Garantías Emil Jalil, por falsificación de instrumento público, torturas, falso testimonio agravado y violación de los deberes de funcionario público. Los detenidos y ahora liberados son el subco-misario Raúl Osvaldo Sánchez, el oficial inspector Miguel Angel Paolini, el sargento Eduardo Ojeda, los suboficiales Duilio Patrone y Juan Héctor Machuca y el agente Mauro Aguilar.


La causa


La causa debe ser profundamente investigada. El motivo principal es que existen efectivos policiales acusados, y que involucran con sus testimonios a jueces, fiscales, abogados y funcionarios de la Departamental Judicial Pergamino( Colón) .


En este sentido, el oficial de la policía bonaerense Miguel Paolini, propuesto por sus jefes policiales y autoridades judiciales para ser premiado por su labor durante 2003, al haber desarticulado bandas de piratas del asfalto con ramificaciones en varias provincias, acusó fuertemente ante la Procuración General de la provincia de Buenos Aires a funcionarios judiciales del Juzgado de Garantías Nº 2 y a un abogado de Pergamino (se le allanó el estudio y se habría encontrado armas y documentos que lo ligan a bandas de piratas del asfalto) de tener supuestas relaciones con bandas de delincuentes.El denunciante Paolini si no era acusado y encarcelado podría haber sido elegido como el “policía del año” en nuestra Provincia.


Entre los trascendidos que hubo en la causa judicial señalaban «con el eficaz accionar de Paolini y el Comando se podrían haber tocado algunos intereses con el fin de sacarlo al “Canario” (Paolini) del medio, para que no esté más en el camino y se aparte de la investigación».


En otro orden, fue llamativo que el juez de Garantías Emil Jalil halla agravado la carátula, que en un primer momento envió el fiscal Juan Gracia cambiando “apremios ilegales” por la figura de “tortura” que no es excarcelable (condena de 8 a 25 años). En este sentido, se debe recordar que los jueces de Garantías en el 95 por ciento de los casos acepta o disminuye el requerimiento de los fiscales y en este caso lo agravó.


¿Quién denunció?


Tal cual lo adelantara Colón Doce los dos denunciantes de los policías tienen un amplio y profuso historial policial. Uno de ellos violó a un discapacitado y en el presente esta detenido con sentencia firme a ocho años de prisión dictada por la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires. El segundo malviviente que denunció el caso esta detenido por robo calificado contra una familia domiciliada en un campo de General Rojo y que además esta acusado por tráfico de estupefacientes.

Según consta en la causa judicial, los dos malvivientes fueron detenidos en el barrio Otero de Pergamino. Los cacos llevaban una escopeta recortada y habrían estado planificando un asalto a un comercio o domicilio particular. Luego del procedimiento los policías fueron acusados por los delincuentes ante el fiscal Gracia dando origen a la causa judicial que conmovió a la región.

La fuerte denuncia


Ante funcionarios de la Procuración General de la provincia de Buenos Aires, el oficial Miguel Paolini, habría denunciado a tres empleados del Juzgado de Garantías Nº 2 del Departamento Judicial Pergamino
El uniformado además puntualizó que el abogado pergaminense denunciado, tenía acceso rápido a las causas que los policías investigaban sabiendo de antemano cuando se libraban las ordenes de detención y allanamientos.


Entre las pruebas que aportó Paolini, ante los funcionarios de la procuración existiría por lo menos dos agendas secuestradas en allanamientos contra piratas del asfalto, donde figurarían números de teléfonos particulares y de teléfonos celulares de empleados del Juzgado Nº 2 de Emil Jalil.


Por otra parte, habría acusado al titular de la UFI N° 2, Juan Gracia de manipulación de personas que serían allegadas a la fuerza o directamente, que pertenecerían a la policía para testimoniar en su contra, ofreciendo a cambio algún beneficio judicial.



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