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09/10/2003
Misterio en la región

Encuentran huesos de niño semienterrados


En dos lugares distintos aparecieron restos humanos. Serían de niños y estarían quemados. El misterio se agrega al cadáver del la laguna de Melincué y la mujer encontrada hace tres meses a la orilla de la ruta 31.


Mientras sigue la investigación por el misterioso hallazgo de restos óseos humanos en el puente «Macucho», fueron encontrados el cráneo, los brazos y las piernas pertenecientes al esqueleto de un niño, que estaban semienterradas en el terraplén del paso sobre el río Salado por la calle Posadas, en las afueras del radio urbano de esta ciudad.


Según indicaron fuentes judiciales, la mayor parte de los restos óseos tenía signos de haber sido quemados y estaba distribuida dentro de dos bolsas plásticas: una de la cadena de supermercados Disco y otra de la panadería Santa Teresita de Junín.


También había otros huesos que estaban semienterrados a la vera del curso de agua y como consecuencia de la bajante del nivel del río quedaron expuestos.


Los voceros consultados estimaron que los restos serían de un niño de unos diez años de edad. Además dijeron que los huesos serán sometidos a peritajes y estudios forenses que determinarán con precisión si esa persona fue víctima de un crimen o sufrió una muerte natural.


Personal policial del Comando de Patrullas, Bomberos y Policía Científica estuvieron trabajando en el lugar durante algunas horas para rescatar los restos, mientras se tomaban muestras del terreno y fotografías del lugar.


Los huesos


Los huesos hallados son un cráneo sin maxilar inferior y con dos piezas dentarias, extremidades inferiores y superiores, un arco costal (costilla), restos de columna vertebral, dos maxilares inferiores (uno derecho y otro izquierdo), una vértebra, un hueso de pelvis y una escapula.


El médico de policía analizó las piezas junto con los peritos de la Policía Científica, quienes determinaron, en principio, que las mismas presentaban signos de haber sido sometidas al calor del fuego para su destrucción. En el caso interviene el fiscal en lo criminal de turno, Marcelo Tuñón.


El hallazgo aumentó la incertidumbre y el misterio en torno a los restos óseos humanos que aparecieron, en el mes de febrero, semienterrados en el terraplén del puente «Macucho», ubicado a un costado del camino al Balneario Municipal «Laguna de Gómez».


Sin embargo, a los investigadores les generó diversas sospechas que los huesos encontrados en el puente de la calle Posadas estuvieran dentro de bolsas plásticas y quemados. «Eso podría darnos una idea aproximada de la fecha en que se produjo la muerte, por ejemplo, pero también permitiría conocer en qué circunstancias ocurrió el fallecimiento», comentó un allegado al caso. En tanto, especuló que la acción del fuego sobre las piezas podría sugerir que «alguien quiso destruirlas».


También señaló que «evidentemente estaban enterrados y el acción del agua los dejó expuestos, luego de que bajara el nivel del río».


Hallazgo en el puente «Macucho»


Este hallazgo se suma al de los huesos enterrados a la vera del puente «Macucho», donde el 13 de febrero pasado encontraron restos óseos que pertenecerían a una persona de unos 40 años de edad y actualmente están siendo examinadas por expertos forenses de la Suprema Corte de Justicia bonaerense y paleontólogos del Museo de Ciencias Naturales de La Plata.


Un dato que sorprendió y abrió nuevas hipótesis entre los peritos y el fiscal que intervienen en ese caso, Sergio Terrón, es que entre los huesos se halló una vaina servida perteneciente a una bala calibre 9 milímetros.


Se trata de una cápsula de cobre percutada, que se convirtió en un indicio que podría ser una evidencia clave para determinar si el caso es un homicidio.


La vaina corresponde a un cartucho diseñado en Francia en 1845, que se fabricó en Estados Unidos y también en Europa, según establecieron los peritos balísticos allegados a la causa.


La antigüedad de la bala hace presumir que los huesos fueron enterrados hace cuatro décadas, pero en ese sentido todavía no hay certezas. Lo que aún no fue establecido es si los restos estuvieron siempre en el sitio donde aparecieron o llegaron allí en medio de tareas de relleno en el terreno.


Según consta en el informe de los expertos en balística el proyectil hallado se utilizaba en pistolas, revólveres y armas largas


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