El primer caso ocurrió con una mujer que se trasladaba en soledad y se produjo el día sábado en calle 21 y 50. La víctima realizó la correspondiente denuncia y reconoció al autor del ilícito.
La Fiscalía Descentralizada rápidamente confeccionó la orden de allanamiento en un domicilio cercano a calle 21 y 55, pero no se encontró el dinero ni el monedero.
Cabe destacar que poco después, otra mujer es atacada por un joven en calle 19 entre 46 y 47, donde le robaron el monedero.
La mujer pidió auxilio y muy cerca de allí se encontraba un agente de la Policía Municipal que se encontraba cumpliendo tareas específicas en un puesto de guardia en un Banco de la zona. El agente logra identificar al arrebatador y luego de perseguirlo logra atraparlo.
En este caso, el caco es menor de edad y una vez identificado resulta ser hermano del individuo que atacó a la mujer en calle 21 y 50. Ambos hermanos tienen un profuso prontuario y hasta hace pocos meses la Justicia había dispuesto un patrullero con agentes en la puerta de su casa para vigilarlos, luego de una "pueblada" de vecinos.
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