"La verdad que muy bien. Siempre le hace falta a uno venir al país para cargar energía. Visito amigos y estoy con mi familia. Acá en Córdoba todo es tranquilo. La gente me hace sentir su cariño permanentemente".
¿Le gusta el fútbol?
Sí, de chico era hincha de Boca pero ahora soy de Belgrano. Ojala podamos subir a Primera División.
Debe estar contento con el descenso de Talleres al Argentino "A"…
No, porque es como si a Boca le falta River o viceversa. Por ahí la mayoría de la gente festejó el descenso por no jugar el clásico durante un año. Pero es un poco raro y yo como deportista lo vivo y lo siento de otra forma.
¿Cómo se vive la NBA?
Se vive con muchísima intensidad y un gran respeto. Allá te pueden alentar o silbar entre otras cosas pero jamás pasan a mayores. Uno no ve un solo papel en el campo de juego. Es la forma de poder garantizar un espectáculo y que el jugador devuelva lo que le brindan ellos. Se puede ganar o perder como en todos lados pero lo toman como un deporte. Si se pierde no es la muerte y no se arman peleas afuera del estadio.
¿Cómo imagina su futuro en la NBA?
En estos momentos estoy estudiando y apreciando cual es la mejor opción para jugar. Por eso cuando este decidido en que club voy a estar, lo comunicaré. No es incertidumbre sino esperar y tomar la desición correcta. Ahora hablaré con mis agentes y veré que pasa.
¿Le va a costar separarse de "Manu" Ginóbili?
Sin dudas. Ojala hubiera podido terminar mi carrera jugando con él. Y en San Antonio. Pero son las reglas de juego y hay que aceptarlas.
¿Alguna vez pensó llegar adonde lo hizo?
No, nunca. Jamás lo pensé ni cuando estaba jugando en Atenas (Córdoba). Entonces todo se debió al trabajo y a estar en el momento justo y en el lugar indicado. Aproveché la oportunidad y no la desaproveché.
¿Cómo es jugar y compartir vestuarios con tantas estrellas?
Increíble. Pasa por la química del grupo y la forma de vivir y poder llevar una cultura que uno va aprendiendo año tras año. También es fundamental la calidad de las personas que te tratan bien.
¿Es difícil enfrentar a Kobe Bryant?
Es lo mas cercano a lo que fue Michael Jordan. Es un jugador completo que te deja la boca abierta con las cosas que puede hacer. Este año dio un salto de calidad no solo por la conversión en puntos sino porque juega mas en equipo y se entiende perfecto con sus jugadores. Ese fue el principal cambio para que puedan salir campeones este año (Ndr: Bryant ganó el título con los Lakers ante Orlando Magic)
¿Es un juego muy físico?
Sí. Las reglas han cambiado en la NBA y se ha puesto un nivel atlético que no hay en el mundo otro mejor. Enfrentas todo el día a trenes preparados para jugar al básquet. Lebron James pesa 120 kilos y tiene un 4% de grasa en el cuerpo, entonces vos decís: "te choca este chico y te mata". Permanentemente hay que usar el cuerpo y hacer o sufrir faltas duras.
¿Cómo está su salud?
La verdad que muy bien. Todos los días voy sintiéndome mucho mejor (Ndr: Hace un mes fue operado de una arritmia cardíaca). Estoy comenzando a entrenar. Ojala en un mes pueda volver a las canchas.
*Periodista. Director Técnico Nacional de Fútbol
Nacimiento Las Varillas, Córdoba, Argentina,
Fecha: 21 de marzo de 1975 (34 años)
Altura: 2.08 m (6 pies 10 pulg)
Peso: 111.1 kg (244 lb)
Trayectoria
Asociación Deportiva Atenas (1993-1998)
Olympiacos B.C. (1998-1999)
TAU Cerámica (1999-2002)
Pamesa Valencia (2002-2005)
San Antonio Spurs (2005-2009)
Títulos
Campeón del Premundial (2001)
Medalla de plata del Mundial (2002)
Medalla de oro en los Juegos Olímpicos (2004)
Campeón de la Liga ACB (2002)
Copa del Rey de Baloncesto (2002)
Copa ULEB (2003)
Campeón de la NBA (2007)
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