Después de 8 meses sin mantener contacto, la reunión entre el Gobierno y el campo se extendió durante tres horas y pasó a un cuarto intermedio hasta la semana que viene. El Gobierno se mantuvo firme en la decisión de no modificar las retenciones y anunció que las medidas acordadas con el sector agropecuario tendrán un costo fiscal de $1.350 millones.
Una vez finalizado el cónclave entre el Gobierno y la dirigencia rural, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, la ministro de la Producción, Débora Giorgi, y el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, explicaron los alcances técnicos de las medidas acordadas.
Giorgi fue la encargada de oficializar los temas que formaron parte de la agenda de negociación y realizar la advertencia más dura para los dirigentes de la Mesa de Enlace: "El Gobierno continúa con su postura de no modificar las retenciones para la exportación de la soja", ratificó Giorgi y Randazzo explicó: "No es un capricho ni un tabú, pero sería injusto para otros sectores, como por ejemplo los docentes, que nosotros modificáramos el nivel de la alícuota a las retenciones a la soja".
A la salida del ministerio de la Producción, los referentes de la Mesa de Enlace sostuvieron que “esta vez no hubo ni halcones ni palomas” y que los funcionarios nacionales mostraron una postura conciliadora, constructiva y abierta al diálogo.
Terminada la reunión con la Comisión de Enlace, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, dijo que es bueno que los dirigentes "vengan como tales a proponer problemas del sector" ya que "si los planteos vienen como dirigentes políticos en realidad deberían tener otro ámbito".
En relación al reclamo de los ruralistas sobre la eliminación de las retenciones, Randazzo opinó: "Muchas veces algunos planteos pierden relevancia e importancia cuando uno mira la totalidad" de los problemas en el país, y sostuvo que el Gobierno le reclamó a los ruralitas que "contribuyan a este momento".
Al abandonar el Ministerio, el referente de Federación Agraria, Eduardo Buzzi expresó que la reunión "no fue mala" y que "hay principio de soluciones en algunos rubros". En tanto el titular de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati afirmó que “fue una reunión con buena onda que no ha avanzado más que en la presentación de las partes".
La dirigencia agropecuaria insistió en que no es momento para hablar de paros de comercialización ni de otras medidas de fuerza, sino de trabajar para llegar a un acuerdo que permita resolver la problemática del sector.
Medidas alcanzadas
* Baja en las retenciones a la exportación de leche.
*Cambios en el sistema de compensaciones en el trigo y aumento en el nivel de precios con la articulación de la apertura a las exportaciones.
* Garantizar el abastecimiento interno.
*Subsidio de 0.10 centavos a los tamberos que produzcan menos de 3.000 litros por día.
*Subsidio para los tamberos que críen al ternero no utilizado para la producción lechera.
*Reducción de retenciones a las economías regionales.
Dimes y diretes
La presidente de la nación, Cristina Fernández llama a la solidadridad de todos los sectores tras el desastre de Tartagal. El campo le responde con el levantamiento de la medida de fuerza que pensaba implementar quedando a la espera de una convocatoria al diálogo.
A través de la prensa trasciende que el presidente de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati, estaría manteniendo encuentros con dirigentes del Gobierno nacional para allanar el camino de acercamiento entre la Casa Rosada y el sector agropecuario sin necesidad de fortalecer a la Mesa de Enlace.
El presidente de Federación Agraria, Eduardo Buzzi, igual que el resto de los referentes agrarios, desmienten la versión tajantemente y aseguran que se trata de una operación de prensa. El propio Biolcati niega que exista algún tipo de contacto.
El vocero de la presidencia, Miguel Núñez, confirma, a través de un comunicado, que el ministro de Planificación, Julio De Vido, se reunió con Biolcati y mantuvo un contacto fluido en el último tiempo.
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