Esta semana un dogo atacó a un niño de cuatro años en Mar del Plata que debió ser internado y operado. El caso es sólo la punta del iceberg de un fenómeno mucho más vasto que, en la Provincia de Buenos Aires, deja cada año unos 100 mil afectados por mordeduras. En Colón existen 6600 perros y se calcula que 300 son de razas consideradas peligrosas. En la mayoría de las mordeduras las víctimas son chicos de 4 a 9 años. Los últimos casos son: Brian, 8 años (mordido en 56 entre 13 y 14); Sandro, 10 años ( 57 entre 11 y 12); Facundo, 6 años ( 10 y 51); Joaquín 11 años (42 y 122) Domingo, 8 años (calle 11 entre 50 y 51); Nicolás, 9 años; Lidia, 6 años (calle 12 entre 54 y 55).
Frente a este panorama, el Ministerio de Salud provincial acaba de elaborar un proyecto de ley -en conjunto con el Colegio de Veterinarios y la Facultad de Veterinaria de la Universidad de La Plata-, que obligará a los dueños de perros peligrosos a inscribirse en un Registro Provincial de Tenedores Responsables”.
Esta inscripción implicará el pago de un canon por la tenencia y allí quedarán registradas las eventuales agresiones en las que haya incurrido el animal, por las que el dueño deberá pagar una multa cuyo valor variará según la gravedad de cada caso.
“Si bien hay algunos municipios que ya adoptaron ordenanzas para regular la tenencia, nosotros impulsamos una norma que rija en toda la Provincia porque la magnitud del problema es preocupante”, indicó Alberto Costa, subsecretario de Contralor Sanitario del Ministerio de Salud Provincial.
En este sentido, el funcionario hizo hincapié en que el 80 por ciento de las lesiones graves provocadas por perros afectan a menores de 16 años, el 80 por ciento de los perros mordedores tienen dueños y el 78 por ciento de los animales que muerden no están vacunados.
A pasear con bozal
Con respecto al traslado, el proyecto establece que los dueños, criadores o adiestradores deberán sacar a los perros a lugares públicos con correa extensible de no más de dos metros y bozal adecuado al tipo de can.
Si bien buena parte de las legislaciones vigentes en el mundo respecto de la tenencia responsable aluden a determinadas razas, el proyecto de ley que impulsa la cartera sanitaria provincial sostiene que la “prevención no pasa por la prohibición de determinadas razas caninas sino por la adopción de medidas de seguridad”.
Por lo tanto, se entiende como animal peligroso a “todo aquel que muestre signos de serlo, que haya tenido algún episodio previo de agresión o que haya sido adiestrado para la pelea”.
De este modo no se cir- cunscribirá la aplicación de la norma a determinados perros, de manera tal que la tenencia responsable de canes involucre al mayor número posible de dueños y se proteja debidamente a la población.
El proyecto prevé que toda persona que adquiera un perro potencialmente peligroso cumpla con una serie de obligaciones entre las que figuran la obtención de un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros o bienes que esos animales pudieran ocasionar.
Según precisó Costa, las legislaciones estudiadas consideran mayormente peligrosas las razas Pit Bull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, American Staffordshire Terrier, Rottweiler, Dogo Argentino, Fila Brasileiro, Tosa Inu, Akita Inu, Bull Mastiff, Doberman, Dogo de Burdeos, Gran Perro Japonés, Presa Canario y Mastin Napolitano. No obstante, por el estudio efectuado desde la cartera sanitaria, el factor raza no es el único que implica peligrosidad. “De hecho en Francia en 10 años se produjeron siete muertes de personas en los que se vieron involucrados pastores alemanes o cruces de estos, por lo tanto, colocar una lista de razas acota el problema y limita las responsabilidades de los dueños”, aclaró Costa.
La posible ley establece que se creará un Registro Especial de Tenedores de Perros Potencialmente Peligrosos. Quienes se inscriban tendrán que ser mayores de edad, tener capacidad física y psicológica para la tenencia, condiciones que serán acreditadas con certificados médicos. Además deberán demostrar la contratación del seguro de responsabilidad civil por daños a terceros. (Datos Dib)
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