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15/11/2007
Masacre de Villa Cañas

Lemos había advertido a dos de sus víctimas


Fernando Armesto y Lidia Ester Arista habían intentado denunciar a Angel Pedro Lemos en varias oportunidades...


El abogado Omar Rodríguez Otegui, defensor de Héctor Daniel Arangel, aseguró que la familia de su cliente había recibido amenazas por parte de Angel Pedro Lemos en reiteradas oportunidades. Finalmente Lemos los mató a los dos. Otegui representó a Daniel Arangel, hoy de 24 años, en el juicio por la muerte de Pedro Rafael Lemos, que tenía 19 años.


Arangel terminó condenado por matarlo de un escopetazo en una casa de Santa Isabel. Pero se consideró un accidente y no un ataque intencional.


El padre de la víctima nunca se recuperó de lo ocurrido. Y el miércoles de la semana pasada asesinó en Villa Cañás a la madre biológica de Arangel y a la pareja. Luego a la jueza comunal de Santa Isabel y se suicidó ante la tumba de su hijo.


El abogado Rodríguez Otegui dice que Lidia Arista, madre de Arangel, como su actual pareja Fernando Armesto, se sentían hostigados por el padre del chico muerto en 2005. “Me dijeron en varias oportunidades que habían ido a Santa Isabel a hacer la denuncia de las continuas amenazas que sufrían por parte de Lemos. Aparentemente nunca les tomaron en forma oficial la denuncia”, señaló.


El abogado asegura haberle dicho entonces a Armesto que si no le tomaban la denuncia volviera a verlo para ir a la Fiscalía de turno de Venado Tuerto y radicarla allí. Dijo que sería necesario investigar si falló la actividad preventiva de la policía de Santa Isabel.


La amenaza coactiva reiterada es un delito que no permite la excarcelación. “Tal vez el haber estado un tiempo detenido lo podría haber hecho recapacitar”, sostuvo Rodríguez Otegui. “Aunque no sé si lo hubiera frenado porque Lemos era una persona desquiciada”, dijo.


Un accidente


En primera instancia, desde el Juzgado de Instrucción, la causa por la muerte de Pedro Rafael Lemos, en noviembre de 2005, se elevó a juicio con la carátula de homicidio simple y luego de la defensa en el Juzgado de Sentencia, a cargo de Fernando Vidal, Héctor Daniel Arangel salió condenado por homicidio culposo, con una pena de tres años, “la cual no obliga ir a la cárcel, entonces salió en libertad”, dijo su abogado defensor Omar Rodríguez Otegui.


El fiscal que había pedido 20 años de condena apeló y la Cámara reformó una parte del fallo, que “mantuvo la calificación de homicidio culposo, pero agravado por el uso de arma de fuego y le dio cuatro años y seis meses de condena y allí quedó firme el fallo”, precisó.


Arangel había cumplido once meses de preventiva, luego recobrado su libertad por casi un año y debía retornar a prisión para completar su condena cuando ésta quedó firme. La prisión preventiva se computa a cuenta de la condena. “Y el año próximo estaría en condiciones de salir con alguna prisión atenuada con salidas transitorias”, afirmó el abogado.


Afecto


Rodríguez Otegui, como varios vecinos de Santa Isabel, coinciden en que Pedro Rafael Lemos y Héctor Daniel Arangel eran amigos. “Incluso vivían juntos en la vivienda de calle Italia donde accidentalmente muriera Lemos”.


“Pedrito vivía con Daniel porque tenía muy mala relación con el padre, que era un hombre bastante violento, nunca se preocupó por el hijo, no sé por qué tomó esta actitud. Tal vez en una personalidad rara, el accidente y la muerte del hijo produjo un disparador hacia la venganza”. (La Capital)


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