El episodio ocurrió el sábado a la tarde en calle 12 entre 42 y 43.
Un muchacho de apellido Vera derramó un líquido combustible sobre una estufa y provocó una fuerte explosión.
El estruendo convocó a los vecinos que ayudaron a la víctima, apagando las llamas de sus ropas.
Los Bomberos Voluntarios llegaron al lugar y evitaron una tragedia mayor debido a que había comenzado a tomar fuego algunos muebles.
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