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22/02/2007
Institucional

La nueva reforma previsional


Para aclarar dudas Sergio Massa habla de que como será la misma. Una vez hecha la nueva elección no se podrá pasar a otro sistema por cinco años (DIB)La Reforma Previsional una vez que se reglamente, cambiará el sistema jubilatorio en la Argentina...


Básicamente, la reforma establece la posibilidad a casi 15 millones de argentinos que aportan al sistema de Reparto (El Estado) o el de capitalización (AFJP), que tengan la libertad de elegir en qué sistema estar. Hoy sólo quien está en el sistema de reparto podía pasarse a una AFJP y no a la inversa. Hoy sólo 2,5 millones de personas aportan al Estado.


La iniciativa del Gobierno Nacional establece que una vez hecha la elección no puede volverse a cambiar de sistema por cinco años y sube de 4.800 a 6.000 pesos el tope de sueldos para la deducción de aportes. Otra innovación es transferir al Estado a los afiliados de las AFJP mayores de 55 años en el caso de los hombres y de 50 en el caso de las mujeres, cuya capitalizaciones sean inferiores a los 20 mil pesos.


El titular de la Anses, Sergio Massa, explicó las principales modificaciones a la Ley 24.241: “el punto central es la libertad de opción, es darle a 15 millones de argentinos la posibilidad de elegir su sistema jubilatorio. La ley 24241 tenía dos mecanismos que hacían que la gente coactivamente fuera obligada a firmar un contrato con una AFJP por no haber decidido cuál sistema jubilatorio quería”.


-¿Cuánta gente quedó en una AFJP por no haber optado al momento de comenzar a aportar?
-Los indecisos desde el año 94 (cuando surgieron las AFJP) al 2006 por no haber optado que terminaron en una AFJP son 5,5 millones de personas. En el año 94-95 cuando nace el sistema de capitalización de cada 10 argentinos que entraban a una AFJP, 8,5 lo hacían por propia decisión y 1,5 lo hacía por no optar; en el año 2006 de cada 10 argentinos que entraron a una AFJP 8,5 lo hicieron como indecisos y solo 1,5 lo hizo a partir de haber optado. Eso lo que demuestra es, primero, que el negocio que tenía como objetivo convencer al ciudadano de incorporarse al sistema de capitalización perdió legitimidad y ahora debe revalidarla.


-¿Cuál es la situación ahora de quienes no se definen al momento de comenzar sus aportes?
-La Constitución Nacional parte de la presunción de que el sistema de seguro social es público. Ahora lo que cambia es la presunción, le decimos si el ciudadano no elige un sistema se queda en el Estado, salvo que él de manera expresa y conciente elija lo contrario. Esos son dos puntales principales del proyecto. El primero tiene que ver con la libertad de elección y el segundo es que le decimos al ciudadano “hasta tanto usted elija se queda en el Estado y nosotros como país le garantizamos el sistema jubilatorio publico”.


-¿Cómo es actualmente la diferencia de haber jubilatorio entre uno y otro sistema?
-El sistema público tiene un mecanismo de desinsentivo que es fijar tu reconocimiento futuro de jubilación en el 0,85 por cada año de aporte. Eso pone al Estado en un pie de absoluta desigualdad frente a la AFJP y de ese modo el ciudadano podía entender que el sistema jubilatorio estatal es poco conveniente. La diferencia entre uno y otro sistema era un 60 por ciento de mayor en rentabilidad en la AFJP. Hoy lo que hacemos es ponernos en un punto de indiferencia similar, pasamos de 0,85 a 1,5 de reconocimiento por año de aporte y de ese modo ambos sistemas están en un pie de igualdad.
-¿Esto no perjudica a las AFJP?


-No, sólo las obliga a esforzarse para mejorar la rentabilidad, deberán incentivar a los ciudadanos y convencerlos que están en condiciones de mejorar la jubilación que te ofrece el Estado. Hoy las AFJP están en lo que se llama “efecto manada”, las dos o tres más grandes definían en qué invertir y las demás las seguían. De ese modo no debían esforzarse porque prácticamente no había competencia entre sí. Ahora, las obligamos a competir y que cada una se esfuerce por dar mejor rentabilidad en el futuro.
-¿Qué pasa con las comisiones de las AFJP?


-Hoy están cobrando de comisión entre 1,1 y 1,6. Ahora se puso un tope, no pueden cobrar más del 1 por ciento para financiar los costos de la cuenta. Hasta ahora de cada 100 pesos aportados te sacaban por ejemplo 16 de gastos administrativos y 16 de seguro e iba a tu cuenta 70 pesos. Ahora si aportas 10 sólo te pueden sacar 1, lo demás va a tu cuenta para tu futura jubilación.
-¿Esperan una fuga masiva de la AFJP al Estado?
-No, la meta es la libertad e elegir, este era un negocio sin reglas de libertad, ahora las hay y le decimos a los ciudadanos que hay dos opciones y que tomen la que crean más conveniente y les garantizamos la jubilación mínima en los dos sistemas.


-¿Se puede proyectar una jubilación futura en cada sistema?
-No quiero hacer una lotería con el futuro de la gente, hubo muchas crisis, gente que aportó mucho, después dejó de hacerlo, alguien que fue empleado y después autónomo, muchas crisis, por eso sólo se puede calcular en función de casa caso particular, lo demás son hipótesis.


AVAL EN EL CONGRESO


La reforma logró media sanción el martes pasado en la Cámara de Senadores por unanimidad. El miércoles los diputados acordaron el dictamen de comisión, paso previo para que se discuta en el recinto este martes. Todos los bloques aprobarían en general el proyecto y algunos bloques como el PRO y la UCR discutirían algún punto del proyecto. Ya en el Senado se resolvió agregar un artículo que garantizaría la intangibilidad de los recursos de la Anses.


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