Buscando tranquilizar a los ruralistas, desde el Ejecutivo aseguran que el nuevo esquema no implicará un aumento en la recaudación global por IIR -que se mantendría en los 500 millones de pesos que llegan hoy a las arcas públicas. Aunque admiten que el cobro del impuesto aumentará “para muchos productores”, sostienen que “bajará para muchos otros”.
“La idea no es que el cambio de determinación del impuesto implique un incremento de la presión global sobre el sector. El año pasado se recaudaron unos 500 millones de pesos por Inmobiliario y estamos pensando en un monto similar para este año” dijo a el ministro de Economía bonaerense, Gerardo Otero.
El nuevo cálculo tributario fue elaborado por el Ministerio de Asuntos Agrarios en función de los mapas sa- telitales del INTA. Otero recibió el informe preliminar y el próximo miércoles el Ejecutivo se reunirá con las entidades del campo (Carbap, Coninagro, FAA y la Sociedad Rural) en el marco de una reunión de la mesa agrope- cuaria provincial para buscar consenso a la propuesta.
El nuevo cálculo por productividad –elaborado a partir de los mapas del INTA- tomará como elemento central las características físicas de cada campo (si es más o menos húmedo, si tiene tosca, nivel de profundad, si el suelo es o no ondulado, si tiene salidad, entre otros puntos) que arrojará un puntaje total que se relacionará a otras variables como la superficie y el valor óptimo del campo.
Según fuentes gubernamentales, se trata de un esquema “mucho más preciso y objetivo” que se aplicará a las cerca de 300 mil parcelas productivas de la provincia. Sostienen que la precisión radica en que las particularidades productivas de cada campo se calculan desde ahora con tecnología satelital (cruzadas con mapas de caminos y vías férreas, hidrografía y catastro provincial) y no a través de la declaración jurada de los productores como venía ocurriendo hasta ahora desde el año’53, cuando se imple- mentó el hoy anacrónico Formulario 911.
El nuevo sistema sería implementado a partir de mayo de 2007, es decir, cuando los productores empiecen a pagar la segunda cuota del Inmobiliario. “No creo que lleguemos a aplicarlo antes” sostuvo Otero. En Carbap, ya comenzaron a analizar la propuesta de Asuntos Agrarios y aseguran que “es muy ambigua”. Por eso el próximo miércoles pedirán “todas las explicaciones y aclaraciones” necesarias.
Por lo pronto, los ruralistas señalan que el nuevo esquema de IIR, al calcular por índice de productividad, “no va a ser idéntico a la capacidad de producir de cada campo, y esto puede ser un problema”.
Es que sostienen que el esquema de productividad deja de lado puntos relevantes como el factor climático (sequías o inundaciones que afectan la productividad) y decisiones políticas que pueden reducir fuertemente las ganancias.
“A un productor le dicen que tiene una productividad de 30 mil kilos de carne en su campo pero si el gobierno restringe la exportación de carne la productividad de ese campo baja. Y eso no lo tiene en cuenta el nuevo esquema” ejemplificó Alfredo Rodes, integrante de la comisión directiva de Carbap. Por eso, la entidad agropecuaria pretende que el IIR se calcule por “la capacidad de producción y de generar recursos de cada campo”.
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