El 21 de septiembre pasado Liliana Ledesma fue asesinada a puñaladas. Tenía también un tajo en la boca, marca que señala la necesidad de silenciarla. Hace 8 años, su esposo, Gilberto Gil Villa Gómez, recibió once balazos, que también lo callaron.
Según explicó a DIB Jesús Ledesma, hermano de Liliana, “Villa Gomez era amigo del (diputado provincial Ernesto José) Aparicio” y sabía que tenía relación con el tráfico de drogas. Y Liliana “también sabía”, explicó Ledesma.
Junto a otros representantes de la Asociación de Pequeños Productores de Madrejones, había denunciado al diputado ante la Justicia por cerrar campos y desmontar campos ilegalmente que impedía que 30 familias trasladaran el ganado. En tanto, Aparicio es considerado la mano derecha del gobernador Juan Carlos Romero en la localidad de Salvador Mazza.
Asimismo, según relató Ledesma, el día que Liliana fue vista por última vez, Graciela Aparicio -hermana del legislador- “había ido a buscarla dos veces y se fue con ella”. La mujer luego fue detenida como posible entregadora, según la orden establecida por del juez de instrucción de Salta, Nelson Aramayo, que interviene en la causa.
El jueves 19 al mediodía, saldrá una movilización desde Salta hacia la localidad de Salvador Mazza, y de allí llegarán al poblado fronterizo de Madrejones, para reclamar justicia por la muerte de Liliana. Participarán de la marcha organizaciones de derechos humanos, trabajadores rurales y la diputada Nacional Nora César
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