Una organización desde un cajero ubicado en la Capital Federal sabía las claves personales de los clientes nicoleños y utilizando tarjetas magnéticas estaba haciendo su agosto.
Los bancos afectados eran Provincia y Nación.
Los clientes concurrían a los cajeros y se encontraban que faltaba dinero y operaciones que no habían realizado.
La organización delictiva (no se sabe como ) lograron copiar la información del cajero ubicado a metros de los tribunales nicoleños y realizaron extracciones piratas en Buenos Aires, todas a la misma hora y por cifras muy importantes.
Cerca de mil personas resultaron afectadas por las irregularidades debiendo recordarse que el Nación confiscó todas las tarjetas que hubieran pasado por el cajero de la calle Guardias Nacionales.
Los damnificados por las extracciones ilegales son, por otro lado, algo más de seiscientos.
La causa que se lleva es por defraudaciones reiteradas y ahora actúan expertos en informática
Los fiscales
El banco Provincia el miércoles devolvió los fondos a los damnificados y ahora deberá dirimir con Link quien en realidad debe hacerse cargo de esos gastos.
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