Desde el INTA informaron que la campaña fue organizada por la Secretaría de Agricultura para el control de la roya asiática y es desarrollada por dicha institución junto con otras entidades de investigación, asociaciones de productores y profesionales.
La red de alarma comprende estaciones meteorológicas -que registran las condiciones favorables para el ataque-, trampas de esporas, lotes indicadores -que se siembran 15 ó 20 días antes que los de producción de cada zona- y monitoreos frecuentes de los cultivos. Así se detectó tempranamente la enfermedad en varias localidades ubicadas predominantemente en el Norte del área sojera.
Se indicó que mediante un trabajo conjunto de las unidades del INTA en la localidad bonaerense de Pergamino, se evaluó la eficiencia de fungicidas, en diferentes dosis y momentos de aplicación. Los resultados de este ensayo realizado por primera vez en nuestro país- demuestran que el uso de estos productos puede reducir hasta más de un 80 por ciento la severidad de los ataques.
Sobre este trabajo se calculó el costo de algunos de los tratamientos, determinando que varía entre el equivalente de 100 kilos por hectárea y 430 kilogramos por hectárea de grano sembrado, según se realicen una o dos aplicaciones.
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