La causa de piratería del asfalto, a punto de ser elevada a juicio, cuenta con 6 detenidos, varios procesados y 2 prófugos
La investigación por una serie de robos de cereal bajo la modalidad de piratería del asfalto que se inició hace aproximadamente un año, tomando repercusión pública por haberse realizado 25 allanamientos en pocas horas, está llegando a su fin, al punto de que en las próximas horas la fiscal que lleva adelante la investigación, Patricia Fernández, procederá al cierre de la misma para que luego se requiera la elevación a juicio.
La causa se inició para investigar alrededor de una decena de robos de camiones con soja que se produjeron en la zona bajo un mismo "modus operandi", en la cual uno de los principales investigadores fue el oficial subinspector de policía Miguel Angel Paolini, cuyos datos aportados fueron todos certificados luego por la Fiscalía, a pesar de los esfuerzos de los defensores por rebatirlos.
La figura de Paolini cobraría trascendencia semanas después cuando se lo acusó de ser el autor de apremios ilegales, en una causa que lo tuvo en prisión junto a otros efectivos, pero que se la vinculó a aquella investigación porque supuestamente habría afectado ciertos intereses de algunos sectores, y por ese motivo habrían intentado separarlo de la causa.
Pero lo concreto es que en base a los datos aportados por Paolini, la Fiscalía actuante pudo proceder al procesamiento de varias personas, de las cuales seis están detenidas, dos permanecen prófugas y dos están en libertad por falta de mérito, pero continúan en condición de procesadas.
Hasta el viernes había cinco detenidos, pero durante la noche de ese día se produjo la sexta aprehensión. Fue mediante un procedimiento realizado por la DDI en un domicilio de calle 11 de Septiembre a la altura del barrio 12 de Octubre. Desde entonces son sólo dos los prófugos, a quienes se los sigue buscando, incluso con orden de captura internacional pues se supone que al menos uno de ellos se encontraría fuera del país.
Un dato de relevancia y que habla bien de la investigación y el proceso realizado por la Fiscalía, es que los cinco detenidos que había hasta el viernes están con prisión preventiva confirmada por la Cámara de Apelación de Pergamino (cuatro) y uno por la de Mercedes, órganos que rechazaron todas las medidas de atenuación de la coerción presentadas por las defensas particulares.
El sexto aprehendido aún no tiene la prisión preventiva por el poco tiempo que lleva detenido, pero se estima que por los elementos probatorios que habría en su contra, se efectivizará esa medida en poco tiempo.
o Algunos números: Para llegar a este número de procesados y detenidos, en esta causa se realizaron 25 allanamientos y secuestros, a pesar del obstáculo que significó en su momento contar con las órdenes para allanar pero no para detener, expedidas por el Juzgado de Garantías Nº 1. Al no poder realizar las detenciones a pesar de haber encontrado elementos comprometedores en poder de los por entonces sospechosos, varios de éstos se dieron a la fuga, y por ello en la mayoría de los casos las capturas demandaron tiempo, esfuerzos y gastos que de otro modo tal vez hubieran sido innecesarios. Asimismo, todavía hay dos prófugos.
Para proceder a las siete detenciones (uno quedó en libertad por falta de mérito y seis continúan con prisión preventiva) se realizaron 14 allanamientos, hechos de urgencia y ordenados por el Juzgado de Garantías Nº 1.
También en el marco de esta causa se hicieron innumerables diligencias de reconocimiento en rueda de personas; se tomaron alrededor de 50 declaraciones testimoniales (algunas de ellas bajo identidad reservada); dos pericias contables y otras de cotejo de rostros e informáticas.
Asimismo se hicieron entrecruzamientos de llamadas por medio de la Unidad de Análisis de las Comunicaciones del Ministerio de Seguridad Bonaerense.
Para todo ello se contó con la colaboración e informes de instructores contadores designados por la Procuración General.
También tomó intervención la Afip ante la irregularidad que exhibían algunas de las documentaciones analizadas. Ello originó una investigación contable e impositiva a fin de demostrar la comisión de delito de evasión fiscal, con intervención de la Justicia Federal.
Estas investigaciones surgieron de los allanamientos realizados en las plantas de acopio de Pergamino y la zona, donde se suponía que se reducía la mercadería sustraída por los piratas del asfalto. Por eso, uno de los procesados es un empresario pergaminense del rubro, a quien se lo investiga por el delito de encubrimiento agravado.
En tanto que los que están detenidos son acusados de los delitos de asociación ilícita, robo doblemente calificado y privación ilegal de la libertad agravada.
Valorar cuando las cosas se hacen bien
La novedad de que esta causa va a ser cerrada para que dentro de poco tiempo se eleve a juicio oral, es una prueba de que no todo funciona mal dentro del Poder Judicial.
Más allá de los procedimientos realizados, de los detenidos y los procesados, lo importante es haber desactivado un circuito de comercialización de mercadería robada, pues no es un dato menor el hecho de que prácticamente no se hayan cometido robos de camiones con cereal en la zona desde que se conoció que esta investigación estaba en marcha.
De hecho, se está cerrando la cosecha gruesa en la zona y no se conocieron robos de este tipo, lo que quiere decir que a partir de la acción de los órganos competentes, se sacó de circulación a una banda que operaba ilícitamente y al mismo tiempo se desalentó una actividad que siempre tenía focos de resurgimiento.
La fiscal Fernández, con la colaboración del doctor Rodolfo Zerbarini y las investigaciones originales del oficial subinspector Miguel Angel Paolini, llevaron adelante esta causa que está a punto de ser finalizada en la instrucción preparatoria, a pesar que aún hay dos prófugos.
De ahora en adelante, con cinco detenidos con prisión preventiva confirmada y otros procesados por delitos excarcelables, sólo resta que todo siga su curso para que en el mediano plazo tengan un juicio justo, donde definitivamente se pueda demostrar la responsabilidad de cada uno en los hechos que se investigan.
En tanto, es de esperar que las fuerzas de seguridad capturen a los prófugos, para de esa manera cerrar totalmente el círculo.
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