26/10/2001

Nervios de punta

  • La Provincia y Colón en alerta por posibles ataques
  • La prevención por ataques terroristas llegó a nuestra ciudad. Las misivas enviadas desde Estados Unidos causan inquietud en la población. Las medidas se extienden al confirmarse un caso de antrax postal en nuestro país. También se puso una guardia en el tanque de agua sanitaria

    El 11 de setiembre cuando cayeron las Torres Gemelas en Nueva York, los colonenses que seguían los sucesos por la televisión no pensaban que su vida iba a cambiar radicalmente y que también la amenaza de los terroristas llegaría a este pequeño pueblo ubicado en la pampa húmeda. La realidad nos abofeteo y también estamos en guardia a igual que millones de compatriotas.
    Las cartas con remitentes del extranjero están creando incertidumbre en toda la Provincia; incluso en Colón: Los remitentes indican que son de empresas turísticas que tienen domicilio en Miami, Florida. Los organismos de seguridad argumentan con preocupación que en total fueron enviadas a la Argentina tres millones de estas misivas.
    En Colón hubo una decena de cartas procedentes de Florida- Miami. En el conjunto recibido y según nuestra información hubo en especial un sobre altamente sospechoso que fue remitido de la ciudad norteamericana de Boston. La misiva no tenía remitente, y lo más preocupante contenía un grosero error en la dirección, tal es así que el destinatario no pudo ser ubicado.
    A el cronista de Colón Doce, le llamó la atención los pocos reflejos de las autoridades del Correo Argentino, para proveer elementos de seguridad a los empleados y carteros ante el peligro que corren al manipular cartas sospechosas de contener agentes bacteriológicos.
    El sentido común nos indica que desde un primer momento se les debería haber dado guantes y barbijos. El propio Ministerio del Interior tuvo que recomendar a las empresas postales su aprovisionamiento.

  • Tanque de agua
  • Por otro lado, en la región se toman medidas de seguridad en los posibles blancos de los ataques terroristas. En la Central Nuclear de Atucha se dobló la cantidad de miembros de Gendarmería Nacional y existe temor en los habitantes de Zárate por las consecuencias que podría acarrear un hipotético ataque al estratégico punto. Cabe destacar que nuestra zona (Colón –Pergamino) no escaparía a los nocivos efectos de la dispersión del uranio enriquecido debido a la corta distancia que nos separa. (apenas 130 kilómetros en línea recta).
    En Colón, el viernes se apostó un vehículo sin identificar en el tanque de agua de Obras Sanitarias en 42 y 23 y existe una guardia permanente de un uniformado policial en prevención.
    Una fuente digna de crédito señaló que el pedido partió del propio intendente Carlos Mazzieri. El funcionario municipal con rápidos reflejos quiere proteger uno de los puntos vulnerables de la ciudad: el agua corriente que puede ser utilizado para transmisión de agentes bacteriológicos.

  • En la región
  • En la Departamental San Nicolás reciben 10 denuncias por día de gente que recibe cartas del exterior. El jefe de esa dependencia Comisario José A. Ferrari informó que una empresa de turismo de La Florida envió tres millones de piezas postales a la Argentina y en su zona, la mayoría de las denuncias tienen que ver con ese remitente de Orlando-Fort Lauderdale. También hubo nervios en Rojas, Arrecifes, Chascomús y otras ciudades de la provincia de Buenos Aires

  • Bromas pesadas
  • Por otro lado, se dieron bromas de mal gusto con dos comerciantes de calle 48 entre 19 y 20 (Forlano y El Trébol) que recibieron sobres repartidos a mano y con un polvo extraño en su interior. Los mismos fueron remitidos al Instituto Malbrán y habrían dado negativo con respecto al antrax. Solo se habría tratado de una pésima broma.
    Los colonenses toman todas las precauciones al recibir las misivas y el cuidado llegó a los servicios prestados por la Municipalidad. En el tanque de agua de obras sanitarias, ubicado en 42 y 23 desde el viernes pasado se puede observar un policía de custodia que evite cualquier acto de sabotaje.

  • Otros casos
  • Mercedes Amigo, una empleada de la biblioteca provincial recibió un sobre identificado como de una empresa telefónica, y cuando lo abrió observó un polvillo que inmediatamente le irritó los ojos y las vías respiratorias. El cuerpo de Bomberos de la Policía bonaerense procedieron a retirar la carta del lugar, al tiempo que decidieron la evacuación de los 70 empleados que trabajan en el edificio, ante el temor que generó la idea de que se tratase de un sobre portador de bacilos de antrax. La mujer había recibido el sobre sospechoso en su casa, pero lo abrió en el trabajo.
    También en el distrito de Chascomús causó nervios el arribo de correspondencia proveniente de Nueva York. Un vecino recibió por debajo de la puerta dos sobres, uno con publicidad de una casa de electrodomésticos y otro en de color celeste con la iniciales OBL, al que observó a contraluz percibiendo que contenía además de una foto de Bin Laden, alguna sustancia que naturalmente no podía precisar; en todos los casos actuó la División Riesgos Especiales de Bomberos de la Policía con sede en Dolores.

  • Carbunco
  • Colón Doce realizó consultas a un profesional veterinario sobre el antrax (carbunco) en nuestro distrito. El médico dijo que hace 15 años diagnóstico la enfermedad en una decena de porcinos y que los análisis realizados en un laboratorio de la Capital Federal dieron positivos.
    También argumentó que al realizar la necropsia no sabía de que enfermedad se trataba y trabajo sin guantes. A pesar de este inconveniente el profesional no se contagió el carbunco. También pudimos saber que en los campos de Colón hubo casos en vacuno y un productor agropecuario agregó que un familiar habría muerto de carbunco al cuerear un vacuno con la enfermedad y recibir las esporas por las heridas que tenía en las manos.

  • La segunda fase
  • El sistema de seguridad se ajusta jornada a jornada y cada ciudadano debe adoptar las medidas preventivas del caso. La segunda fase de este ataque terrorista sería más grave. Los organismos de seguridad hablan de enfermedades tales como la viruela. La misma a diferencia del antrax que no se contagia de humano a humano, tiene un contagio exponencial. La gravedad de la viruela esta determinado por su virulencia cuando hay un enfermo declarado, ya a su alrededor existen por lo menos veinte contagios. Por otro lado, las autoridades nacionales indican que existen suficiente capacidad para producir antibióticos por el antrax.
    El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires reiteró a la población una serie de recomendaciones para manipular cartas u otros elementos potencialmente contaminados por Antrax u otros agentes biológicos. En el caso de la aparición de cartas o paquetes sospechosos, se pidió prestar especial atención si exhiben: Franqueo excesivo; rótulo de paquete manuscrito o escrito a máquina; título incorrecto; título sin identificación (nombre y apellido); errores ortográficos; engrasado, decolorado u oloroso; sin remitente o con remitente desconocido; peso excesivo; material de seguridad excesivo (paquete); distractores visuales y observaciones restrictivas como «personal» o «confidencial». Ante cualquiera de esas situaciones, el Ministerio recomendó no manipular la encomienda y dar aviso de inmediato a la comisaría más cercana.
    Las autoridades pidieron no sacudir ni vaciar el contenido de un sobre o paquete sospechoso; colocar el sobre o el paquete en una bolsa plástica u otro tipo de recipiente de paredes rígidas (preferentemente plástico o con tapa a rosca) para evitar pérdida del contenido; también debe colocarse el recipiente rotulado (origen, identificación y fecha) y envuelto en papel absorbente, dentro de una caja de cartón rellenada adecuadamente con papel de manera de inmovilizar el mismo. Si no se dispone de una bolsa o un recipiente, se sugirió cubrir el sobre o el paquete con una tela o un papel y no moverlo. De inmediato, debe abandonarse la habitación, cerrar la puerta y tomar las medidas necesarias para evitar el ingreso de otras personas.
    Si llegara a presentarse el caso de un sobre que desparramó un polvo, deberá cubrirse el contenido con una tela o un papel, pero no hay que intentar limpiarlo.
    Por otra parte, la persona que se enfrente a un sobre con esas características, deberá quitarse la ropa posiblemente contaminada y colocarla en una bolsa plástica.



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