Un uniformado acusó a otro por el faltante de cien pesos. El acusado presentó la denuncia y concurrió al lugar el oficial de servicio. El acusado pidió requisa.
El hecho sucedió el viernes a las 13.30. La historia según una fuente presencial tuvo ribetes inusuales e insólitos.
Todo habría comenzado con la denuncia oral de unos de los policías que estaban de custodia en la entidad crediticia. Los hechos siguieron una cronología llamativa. Uno de los policías bajó de la garita y dejó la billetera en su interior.
Los minutos pasaron y al regresar revisó la misma y habría notado que supuestamente le faltaba un billete de cien pesos. El uniformado molesto bajó y le dijo a su compañero -otro suboficial- que le faltaba el dinero y que el único que había tenido acceso a la garita había sido su persona, pidiendo que devolviera el dinero.
El acusado negó la situación y rápidamente con mucha indignación llamó al oficial de servicio de la Comisaria de Colón y pidió que inmediatamente se constituya al Banco Provincia de Buenos Aires, con una instructora judicial.
El oficial de servicio se dirigió rápidamente a la entidad bancaria. Allí el acusado muy molesto explicó la situación y pidió que inmediatamente sea revisado y además se requisara la garita, para que los presentes puedan constatar si el "famoso" billete aparecía en su poder o escondido en algún lugar. El policía no se había movido de la garita para que se comprobara su situación y su inocencia.
La requisa
Según pudimos saber por nuestra fuente, luego de algunas conversaciones se comenzó con la requisa de rigor. El policía se sacó la camisa y la entregó al oficial para ser revisada, luego siguió con los pantalones del uniforme. El policía pidió que se revisara los repliegues y los dobleces. Por último, se habría sacado el calzoncillo quedando completamente desnudo. Por último, entregó el arma desarmada y pidió que se revise el caño debido a que el billete podría estar enrollado en ese lugar. También se requisó la garita y sus inmediaciones, no encontrándose lo denunciado como faltante.
Sumario
Otra fuente creíble, señaló que el comisario Roberto Silva, dispuso la apertura de un sumario administrativo para ambos policías. El hecho -luego de cumplimentar pasos legales- puede derivar en una denuncia penal de una u otra parte. Colón Doce pudo determinar que el policía acusado habría puesto a una conocida abogada para iniciar acciones judiciales contra su acusador.
