07/07/2000
La vida después de los setenta: Martín Insaurralde, 79 años.

Es una historia familiar muy particular.
Sus abuelos llegaron a San Nicolás de la región vasca española en el siglo XIX.
Luego realizaron un breve pasaje por Salto. La búsqueda de mejores horizontes los llevó radicarse a comienzos del siglo XX en nuestra ciudad. Su padre formo una familia de tres varones y tres mujeres. Martín nació un 30 de julio de l920. La primer casa que habitó la recuerda cercana a la "quinta del Hospital" en calle 49 entre 11 y 12.
Cursó los estudios primarios en la Escuela Nº 4. Su primer trabajo cuando tenía ocho años fue canillita; Martín nos dice "en ese tiempo se vendía los diarios La Prensa, Critica y una revista local que se llamaba "El trovero de las niñas". (pudo ser el primer medio escrito de Colón).

Martín Insarrualde abrazó su profesión a los diez años. El imprentero recuerda: "a los 10 años ingresé a trabajar en la imprenta del Sr. Enrique Blanco, situada en calle 48 entre 22 y 23. Allí estuve hasta que me tocó el el servicio militar en San Nicolás. En total fueron 18 meses hasta que nos dieron la baja en la compañia de "Puentes Pesados".
El problema era que comenzaba la guerra mundial y nos decían que nos enviarían a las costas de Brasil". Agrega "al regresar trabajé por mi hermasno en la Voz de Colón, que era de la familia Cardozi, mi tarea era de tipógrafo, en el lugar me mantuve por 10 años y cuando Juan -mi hermano- regresó se fue a San Isidro y siguió con el oficio en ese lugar".

Martín nos cuenta como se inicia su imprenta. "En esa época las imprentas se dedicaban solamente a ciertos trabajos.
Pero mi hermano Juan y yo vimos el negocio en hacer etiquetas. Me acuerdo que estaba Carlos Montagna -que era mi amigo porque había jugado en Racing- Bianchini y Permigeat de Ferré, que traían para la venta el vino a granel y luego lo fraccionaban.
Ellos mandaban a realizar las etiquetas a tres colores a Pergamino. Nos pusimos de acuerdo y Juan se separó de su socio de San Isidro y compramos maquinas alemanas, rápidamente nos pusimos a fabricar esas etiquetas. En l953 pudimos concretar el emprendimiento cuando nos instalamos con nuestro negocio en calle 48 entre 21 y 22. Siempre teníamos mucho trabajo y hasta le imprimimos toda la papelería de Induswheel, cuando la fábrica textil estaba en sus comienzos. Agrega " Juan hace 32 años que se mató en un accidente en la ruta, cuando llevaba pollos de la planta Coob. Lo notable es que en aquella época ya quería comprar el sistema que se usa en la actualidad que es el offset ".

En l956 se trasladan al actual dirección comercial, situada en calle 21 entre 48 y 49. "La propiedad se la compramos a Héctor Solana que era candidato a diputado nacional por la UCRI de Frondizi, en la zona de Firmat y no quería dejar la casa sola porque se iba a deteriorar". En el mismo lugar Martín todos los días y casi a los 80 años sigue desarrollando su tarea, siempre acompañado por su hijo Daniel y su esposa Herminda.

Martín Insarrualde es otro de los simbolos de Racing. Comenzó a practicar el popular deporte en l932 en la quinta división y llegó a jugar en primera división en l938.
El notable equipo de Racing fue campeón en l939 y estaba formado por: M Truffa, H. Gastambide, A Ciavattini, G. Garcia, J Ciabatini, y E. Alvarez, P. Montagna, E. Spagnuolo, M. Peréz, R. Robba y M. Insaurralde. "Era un gran equipo y recuerdo que mi primer torneo lo jugué en Venado Tuerto en el club Centenario".

Entre los máximos recuerdos de Insaurralde se encuentra la final pérdida en Junin por el campeonato Argentinio de Selecciones. "La campaña se realizó en l944.
En la zona " A" le ganamos la final Baradero luego de varios partidos, el primero de local empatamos 2 a 2 y en Baradero 3 a 3.
El tercer partido lo jugamos de nuevo en Colón y le ganamos 6 a 1. Por su lado el seleccionado de Junin salió campeón de la zona "B".
El gran día llegó con muchas expectativas. Ese domingo amaneció lloviendo y nos fuimos en varios autos a jugar. El primer tiempo terminó 3 a 1.
La gente decía que el partido estaba liquidado porque habíamos jugado con viento y lluvia en contra; pero ellos en el entretiempo se cambiaron los tapones, usaron más largos y nosotros no habíamos llevados.
La lluvia hizó que no hicieramos pie y terminaron ganando 5 a 3. En cancha seca lo hubieramos pasado por arriba". Martín concluye el reportaje diciendo "es un partido que todavía me duele haber perdido".



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