19/11/99
Miriam Buisart está de regreso en nuestra ciudad



  • La causa

    Cronistas de Colón Doce siguieron desde el inicio la causa judicial por el homicidio de María Rosa Di Leo, que tiene en el presente más de 1700 fojas. Las preguntas que nos hacemos son varias debido a que hubo fallas importantes en la investigación del comisario Rodolfo Romero, y que son casi inexplicables. Tal vez el mayor misterio -que de haberse investigado podría haber echado luz a este homicidio- es una llamada que recibe Buisart dos días antes del crimen y al que nos referimos en varias ocasiones.

    Esa llamada telefónica es muy particular y da la pauta que el homicidio pudo ser fríamente planificado. Para entender esta situación debemos aclarar el uso en la investigación del excalibur (mecanismo que detecta el origen de la llamada y su destino), además se debe recalcar que el teléfono de Buisart estaba intervenido por orden secreta de la Side (ver fotografía) y se realizaban grabaciones sobre todo lo conversado.

    Tres días antes del asesinato de María Rosa Di Leo, un hombre llama al teléfono del chalet de calle 46 y atiende un familiar directo de Buisart. El hombre dice llamarse "Lucho" (por Laplacete) y pregunta por Buisart. El familiar le dice que no está. El hombre indica un teléfono y pide que Miriam lo llame. El familiar olvida comunicarle la novedad a Miriam. Pocos días después el familiar lo recuerda y le avisa, entregándole el número telefónico. Buisart no llama al teléfono dado y llama a la casa de Laplacete, éste la atiende y le dice que nunca realizó el llamado y que nunca dejó un teléfono. La persona que realizó esa comunicación dos días antes del crimen, quería involucrar a Buisart en el futuro homicidio, porque sabía que luego ese teléfono sería investigado y que la llamada quedaría registrada. Ese número telefónico anotado se perdió, pero todavía puede ser la llave de un misterio insondable.

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